Los Hijos de la Estrella Roja están compuestos por los asesinos más hábiles del Reino, pero no todos los trabajos requieren sigilo y astucia. Aquí es cuando se convoca a Yōshanai Kari. Se dice que este guerrero inquebrantable es un Yōkainari, o el fantasma de un demonio. Los Yōkainari no duermen, comen ni tienen otras necesidades tangibles. Como tal, es un misterio cómo Skapular convenció al demonio espadachín para que se uniera a su facción de mercenarios. Independientemente de lo que prometió a los Yōkainari para ganarse su lealtad, fue un gasto que valió la pena, ya que Skapular se deleita en utilizar a su secuaz de pesadilla para enviar un mensaje claro a aquellos que piensan oponerse a los Hijos de la Estrella Roja.

Las pinturas finales y ciertos detalles del producto final pueden variar ligeramente de la imagen del prototipo que se muestra. Es posible que no se muestren en la imagen todos los accesorios finales incluidos.